Exposición de dibujo para sitio específico y performance de Marcela Rapallo, a partir de diálogos con los colegas y amigos colombianos Raúl Trujillo, Powerpaola, Enrique Lozano y Alejandro Tamayo. La inauguración contó con una performance a cargo de YECA: Andrea Fasani, Claudia Toro, Santiago Peresón y Marcela Rapallo. La curaduría estuvo a cargo de Tatiana Sandoval. Se realizó en abril del 2014 en P.I.C.A. Espacio de Experimentación de Fundación Lebensohn (Montes de Oca 239, Barracas, CABA).
La obra “Hacer oficio, patear la calle” abarcó la realización de un dibujo con cal sobre una vidriera conectada con la calle, elegida para poder abordar la representación del espacio público a la vez que el encuentro con quienes lo transitan.
En mi trabajo busco explorar la representación de la forma en que pensamos las imágenes, el carácter efímero de la memoria visual y su transformación constante. Concebirla como un tramado de recuerdos, percepciones y sensaciones, donde no hay mundos aislados sino experiencias que se van registrando y sumando. El dibujo funciona como un medio para hablar del acto de mirar, sobre qué elegimos mirar de todo lo que está a la vista, sobre cómo se articula el imaginario colectivo y el bagaje personal en la elección que implica ese acto de mirar.
En el contexto de mi ciudad, Buenos Aires, trato de indagar en figuraciones representativas y también abordar la percepción de la naturaleza desde una mirada que le sea propia. Trabajo sobre la coexistencia de imágenes que pertenecen a ámbitos diversos: imágenes mentales, urbanas, naturales, espacios íntimos, públicos, barriales, céntricos, televisivos, publicitarios, imaginarios, fantasiosos, etc.
Para esta obra tomé como punto de partida un intercambio de miradas entre las ciudades de Argentina y de Colombia en general, y de Buenos Aires, Medellín y Cali en particular. Me motiva el fuerte cruce entre culturas producido en mi ciudad por la inmigración colombiana, y en particular el trabajo conjunto que hago desde el año 2007 en proyectos con personas artistas colombianas. Invité a cuatro de estas personas: Powerpaola, Enrique Lozano, Raúl Trujillo y Alejandro Tamayo, a trabajar en un formato de dibujo y escritura colaborativa, virtual y físico, indagando en ese encuentro entre las miradas y el imaginario colectivo de estas ciudades. Utilicé el material resultante de esta experiencia como punto de partida para la realización de los dibujos en el soporte de la instalación.
En esta obra, como en mis procesos de trabajo en general, se articulan de manera recíproca las obras individuales, grupales, colectivas y los proyectos en el marco de la educación artística. La siguiente colaboración que formó parte de esta obra, fue la performance en la que dibujé en vivo a través de proyecciones que intervienen el dibujo del vidrio, en un diálogo audiovisual junto a la agrupación YECA, que conformé junto a Andrea Fasani, Claudia Toro, y Santiago Peresón.
